En esta etapa, trabajamos en la obediencia básica, el desarrollo del instinto de caza y la enseñanza de patrones de búsqueda. Nuestro enfoque es personalizado para cada perro, asegurando un aprendizaje progresivo y efectivo.
Enseñamos comandos básicos como “sentado”, “quieto”, “ven” y “aquí”.
Introducimos el uso del silbato para facilitar la comunicación a distancia.
Fortalecemos la relación entre el dueño y el perro mediante refuerzo positivo.
Exponemos al perro a terrenos abiertos para estimular su independencia y curiosidad.
Introducimos olores de codorniz, perdiz y becada para activar su instinto natural.
Realizamos sesiones controladas con aves enjauladas para fomentar la muestra.
Enseñamos un patrón de búsqueda amplio y ordenado en el campo.
Reforzamos la respuesta al silbato o comandos de voz para mantener el control.
Gradualmente acostumbramos al perro al sonido del disparo.
Para perros con experiencia en caza que presentan dificultades o requieren perfeccionamiento, ofrecemos sesiones de corrección de comportamiento y optimización de habilidades.
Trabajamos en la firmeza de la muestra para evitar que el perro rompa antes de la orden.
Reforzamos la paciencia del perro utilizando aves controladas y comandos específicos.
Aplicamos refuerzos positivos para mejorar la precisión y duración de la muestra.
Para perros que se alejan demasiado, ajustamos su radio de acción con ejercicios específicos.
Si el perro busca de manera desordenada, aplicamos ejercicios de patrón en zigzag.
Desensibilizamos a perros sensibles al disparo con entrenamientos progresivos.
Para perros que no recuperan piezas, trabajamos con señuelos y cobros en seco antes de usar aves reales.
Ofrecemos prácticas en caza real para que el perro aplique sus habilidades en condiciones naturales.
Entrenamos en terrenos abiertos con vegetación baja para mejorar la muestra y la búsqueda.
Trabajamos en zonas de cambios de elevación para mejorar la resistencia del perro.
Perfeccionamos el control en la muestra debido a la tendencia de la perdiz a correr.
Entrenamos en bosques y terrenos de vegetación densa para mejorar la búsqueda.
Refinamos la precisión en la muestra debido al camuflaje natural de la becada.
Entrenamiento personalizado adaptado a cada perro.
Técnicas efectivas y basadas en refuerzo positivo.
Sesiones de entrenamiento en campo abierto y caza real.
Corrección de problemas de comportamiento y optimización de habilidades.
Entrenadores con experiencia en la caza y el adiestramiento profesional.
Si deseas mejorar el desempeño de tu setter inglés o cualquier otro perro de caza, contáctanos para conocer más sobre nuestros servicios y programar una evaluación personalizada. ¡Transformamos a tu perro en un verdadero campeón de la caza!